lunes, 27 de abril de 2009

Parcial sobre el RESPETO Y EL AMOR


Parcial sobre :
El Respeto y El Amor
Sobre mi apreciación de estos dos conceptos debo decir; que considero que muchas veces el mayor respeto lo encuentro en un real rapapolvos y el mejor amor en un auténtico distanciamiento.
Y lo digo a sabiendas de que para muchos , quizás para la mayoría , esto sea un contrasentido.
No creo que se respete más a aquel al que no se le dice la absoluta verdad de lo que nos comunica en cada momento , ocultándole todo cuanto de él nos disgusta e incluso nos motiva ira e hiere .
Respeto hacia el otro es decir y manifestarle en todo momento, la verdad de lo que nos provoca en el instante…
Deja ser respeto para ser otra cosa, si se utilizan piedras arrojadizas viejas y caducadas. Eso ya es venganza, odio, difamación o cualquier otro interés con motivo malsano…
Amor, no es decir mil te quiero, ni deseos concupiscentes, ni noches de luna , ni bellos amaneceres, ni cálidos sentimientos, ; al menos no es solo eso , aunque también.
Amar es conocer y respetar lo que se ama. Lo que se ama y todo cuanto esto representa, todo cuanto con ello tiene que ver , todo cuanto abarca, su entorno, su radio de acción , su cometido, su vida.
Nadie absolutamente nadie , tiene derecho a incidir en la vida de otro, ni tan siquiera con lo que pueda considerar la verdad desde su punto de vista ; que no será otra cosa que eso …su punto de vista , sobre algo que desconoce por no ser su vida, ni sus circunstancias. Aún menos con lo que ciertamente conoce como incierto, aunque yazca en lo más profundo de sus deseos y no considere un autentico daño desde el punto de vista que mueve sus intereses.
Pero dónde comienza ciertamente todo esto a adquirir un baremo de aplicación desde el que la apreciación del error pueda tener una certeza definida, pues la honestidad nos obliga a reconocer , que es ciertamente de difícil aplicación …
El comienzo está en el Respeto por uno mismo, en mostrarse cada uno como realmente es, en no fabricarse una imagen para agradar a los demás, sino en que los demás puedan conocer y saber lo que deben esperar de ti en cada momento. Conocerte a ti y estar seguros de lo que eres , en tus palabras y en tus silencios. El auténtico siempre. El que jamás se justifica. El que jamás se desdice. El que es consecuente consigo mismo. El que no quiere puertas traseras. El que jamás tendrá más de una versión para aplicar según le vayan las cosas .
El que nunca y en ninguna circunstancia es capaz de guardar rencor , ni odio, ni guarda negatividad alguna, pero tampoco fuerza que le sean afines, agradar o resultar simpático.
Continúa el camino recto, y antepone la verdad a cualquier otra cosa, se muestra tal como es y jamás inicia una confrontación con nadie, ni es ese el ánimo que le mueve.
Pero jamás agachará su cabeza ni bajará la mirada si alguien le busca.
Porque todo cuanto representa su propia estima es el respeto que siente por su palabra que no es otra cosa que su propia esencia.
V.Nas

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