miércoles, 29 de septiembre de 2010

¡Qué vergüenza!





En días como el de hoy, en el que de forma muy concreta sufres la demagogia y la falta de libertades de este país como laceraciones en la piel; el deseo de desaparecer, de no formar parte de la necedad de este mundo, de la fuerza bruta, de una monarquía republicana, y una república monárquica... de un tira la piedra sin que se te vea la mano, de

un calumnia que algo queda, de una democracia de único partido:

Recuerdo con nostalgia el Parque de Redes y cuán poco hace falta para vivir como un auténtico ser humano.
En donde puedes moverte sin miedo.

V.Nas







1 comentario:

A. Elisa Lattke Valencia dijo...

Preciosas imágenes y sensible opinión, mi querida Amiga. Se hace necesario pensar qué nos queda entre tanto demagogo politicastro y tanto de lo que ahora tenemos que recoger por su mala administración. Pero no da vergüenza enfrentarse a un pueblo cuando esos votantes del ayer, quisieron elegir y se equivocaron, eso es seguro, pero como lo que prevalece es la doctrina de los partidos y una forma de ver dentro de la misma 'sus ideales', pues es posible que llueva sobre mojado ante la sequía en que se mantienen las necesidades, por eso de mejorar la plana. Menos mal que estos momentos que nos enseñas y que son envidiables, sirven para sentir que la vida tiene alicientes impagables y que merecidamente vuelven a oxigenar la necesidad de sentirnos alejados de esa otra realidad, en la que quizá se está bien pero no tan cerca de la Naturaleza de Dios y de sus cosas, donde el ser humano sí tiene cabida, pero desnudándose de todo lo que le ata al mundo.

Me pregunto -y aquí me sale la ranita con sus cosas..._ Sí no se temen a los osos en esos parajes tan sanos y hermosos, aunque si se lleva un osito de peluche siempre será mejor que los auténticos que hay por esos lares, para sentir el sol que da el amor feliz y tendido en campo lleno.

Y a los políticos que los z...

Un abrazo. Elisa