Ser humano, Lucero que del Cielo llegas, con bellos presagios prendidos con Luz Eterna.
Ser humano, que inicias tu vivencia física olvidando el pasado que ya ha sido, para ser nuevamente Tú, en tu experiencia nueva.
Ser humano, que careces de recuerdo del bello Ser que acompaña tu viaje, porque sólo desde el olvido, se alcanza el recuerdo.
Ser humano, perfecta maquinaria del plano físico, que en su conjunción de toda la vida que alberga en su interior, conforma su totalidad.
Ser humano, que no alcanzas a reconocer la plenitud que Tú, eres, porque de ser así, te abarcaría el ansia de regresar a Ti, y abandonarías tu experiencia de Luz y de Sombra, en la Tierra.
Ser humano, que envuelto en la carencia de la certeza de tu bello regreso a Ti, vives vicisitudes y tristezas y gozos y alegrías.
Ser humano, eterno caminante que viaja sin mirar lo que realmente Es, y que después de su nueva experiencia, regresa a Ser.
Ser humano, ínfima partícula Universal, colmada del Todo, aunque no recuerde el proceso de la Luz, en el que está inmerso.
Ser humano, eje del plano físico, constructor de materia, partiendo de materia. Inteligencia racional que hace que el Alma encarnada se involucre en diversas vivencias de dicha o tristeza.
Ser humano, Alma de poeta, de sinceridad, de gozo y alegría y también... Alma oscura con lugares sombríos para sembrar desdicha y así hacer que otros sucumban, o quizás intenten sembrar un nuevo y bello Amanecer.
Ser humano: Cuántas notas con sonidos bellos anidan en Ti y cuantos odios repartes cuando tu Alma duerme...
Ser humano, dureza de vivencia cuando el Alma olvida el Éter y la Vida, porque si el humano recordara la Libertad del Alma inmortal, ejercería el rechazo de las vivencias de odio hacia el otro.
Es por ello, que el Cielo pone vallas y compuertas, para que el humano no atisbe detrás de la muralla, su Verdad, ya que, de ser así, pondría en riesgo su vida física, para regresar hacia ese Camino de Luz del que partió, para regresar a ser lo que realmente Es:
Un Alma encarnada que deja sus Espacios libres de materia, para construir o derribar en la experiencia, en donde el Todo se involucra en forma humana, entre las luminarias del Amor y también, en las tristezas de las Sombras, según sea la dirección a seguir, de aquel que encarna.
Celia Álvarez Fresno 2-02-2021.