sábado, 27 de septiembre de 2014

Jordi Pujol


 
He sentido pena. Según le oía hablar no se me iba de la  cabeza  “El cornudo, apaleado y contento”  
Se rió pública y politicamente de todos los catalanes y ni siquiera se puso colorado.

Solo queda  hacerse una pregunta  ¿Hasta que punto manipuló el catalanismo? Sería que pretendía unicamente “escriturar” el patio de  “ su casa” quedar  a buen recaudo de ser contabilizado.
¿ Pasará el pueblo catalán a la historia como  aquel  de cuya inteligencia  se rió Pujol?  ¿Se merece esto el pueblo catalán?
Mi mayor sorpresa ver cómo había quien iba  a darle mano en señal de apoyo


3 comentarios:

Luis dijo...

De los políticos y de la política prefiero no opinar.

Juan Carlos Celorio dijo...

Un espectáculo lamentable. Dicen que si niegas la evidencia con vehemencia terminas por sembrar la duda y esa debió ser su táctica. Pero no creo que cuele.
Besos.

A. Elisa Lattke Valencia dijo...

Es poco lo que se puede decir ya de este personaje porque ha echado por tierra su imagen. Pensar que tenía una fundación (Tapadera para dar confianza) ...relacionada con el estudio de la Ética y la aplicación de la misma a la vida en sociedad y política. ¡ah, por Dios, que aberración y que infelicidad ser tan hipócrita. Da infinita tristeza que aún tengan amigos y creo que son los que en cualquier momento aún se sienten agradecidos por cualquier favor. Si en realidad lo pensaran podrían dar un lección de ética con ignorar a esta gente. Menudo timo.

Un grato saludo poder seguir tu blog y leerte de nuevo.